Depravado

Le había vuelto a pillar. Esta vez intencionadamente. Se levantó de la cama sin hacer ruido y se acercó sigilosa como una felina dispuesta a cazar a su presa. Sentado frente al ordenador y de espaldas a la puerta no resultaba difícil sorprenderle mirando otra vez las dichosas fotos, con la mano derecha agarrando el ratón y la izquierda ocupada en lo que por el movimiento rítmico del brazo era fácil deducir. Sintiéndose humillada le llamó baboso, depravado y no reparó incluso en decirle que le repugnaba estar casada con un tipo así. Él, avergonzado, le pidió perdón y le prometió que borraría para siempre esas fotos íntimas en las que ella, provocativa y exuberante, posaba para él treinta años atrás.


Publicado en ENTC

Foto: Pixabay

No hay comentarios: